Análisis: el blog de Sociedad y Educación

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Publicado el 15 Mar 2015 / Sin comentarios

¿Impactan las TICs en el rendimiento académico de los alumnos?

Fecha y fuente: Computers & Education, 2014.
Gabriela Sicilia (UCM). Fundación Europea Sociedad y Educación.

 

La inversión en Tecnologías de la Información y la Comunicación (TICs) en los centros educativos ha sido una de las políticas educativas más impulsada en España en las últimas décadas, desde la introducción de salas informáticas a partir de los años ochenta hasta la implementación del Programa Escuela 2.0 con la entrega de un ordenador por estudiante. Sin embargo, poco se sabe aún del impacto efectivo que estas políticas han tenido sobre los resultados académicos de los estudiantes. Las principales razones a la hora de justificar la escasez de este tipo de evaluaciones de impacto, responden básicamente a la complejidad en la relación entre las TICs y el aprendizaje, la falta de información disponible acerca del uso efectivo de las herramientas TICs en las aulas, pero sobre todo, a la dificultad de encontrar una estrategia de identificación causal que permita evaluar el verdadero impacto del uso de las TICs cuando las intervenciones no surgen de experimentos aleatorios.

En este sentido, en un reciente estudio Does ICT matter for effectiveness and efficiency in mathematics education?,[1] los profesores De Witte y Rogge estiman el impacto del uso de las TICs en el resultado en matemáticas de alumnos en cuarto curso de educación primaria utilizando datos del programa ‘Trend in International Mathematics and Science Study’ (TIMSS) de 2011 para Holanda. Para estimar el efecto causal, los autores utilizan una metodología cuasi-experimental de emparejamiento[2]. Esta técnica consiste en simular un experimento donde, a partir de una muestra de datos no experimentales, se emparejan alumnos con características (individuales, escolares, de los profesores y regionales) similares, a excepción del tratamiento que reciben y del que se quiere medir su efecto. Este emparejamiento permite, por tanto, realizar comparaciones más justas del efecto del tratamiento controlando por la posible presencia de endogeneidad[3]. En el estudio, los autores analizan dos tratamientos: la disponibilidad de TICs en el aula y la frecuencia del uso de las TICs. Asimismo, los autores estiman el efecto de las TICs a partir de la muestra original sin emparejar, es decir, sin controlar por endogeneidad, con el fin de comparar los resultados.

 

Tabla 1. Efectos de las TICs sobre el resultado en matemáticas en cuarto curso de educación primaria

Tratamiento Muestra Tratados Control Diferencia Desv.Est. t-test p-valor
Disponibilidad de TICs Sin emparejar 544,382 540,662 3,720 2,317 1,610 0,054*
Emparejada 544,382 544,389 -0,006 3,588 0.000 0,500
Frecuencia en el uso de TICs Sin emparejar 543,395 539,512 3,882 2,606 1,490 0,068*
Emparejada 543,395 540,345 3,049 3,908 0,780 0,218

Fuente: De Witte y Rogge (2014)
Nota: * Coeficiente significativo al 10% de confianza.

Los resultados muestran que si se compara el rendimiento de los alumnos directamente sin emparejar las muestras, tanto la disponibilidad de TICs como la frecuencia en el uso de las mismas muestran efectos significativos y positivos sobre el rendimiento en matemáticas, los cuales dejan de ser significativos una vez que se controla por las características de los estudiantes y el entorno. Parece ser, por tanto, que la introducción de las TICs no causa per se una mejora en el rendimiento de los estudiantes.

Si bien esta evidencia se refiere a un contexto particular y los resultados no son directamente extrapolables a todos los contextos, tiene sentido sospechar que en España podría suceder algo similar. Pero, aún no hay evidencia suficiente para determinarlo. Por ello, el propósito de esta entrada no es discutir los resultados del estudio en sí mismos, sino incentivar a la reflexión en la comunidad educativa y científica acerca de la importancia de evaluar rigurosamente (controlando por las características de los estudiantes y las de su entorno) el impacto de las políticas educativas relacionadas con las TICs y qué elementos podrían explicar el éxito de estas intervenciones. Las bases de datos del programa TIMSS también están disponibles para el caso español, así como otras evaluaciones internacionales y nacionales, que proporcionan información acerca del uso de las TICs en el aula, y que podrían ser utilizadas para llevar a cabo evaluaciones de impacto. Las intervenciones tecnológicas implican la inversión de una gran cantidad de recursos económicos y la participación de múltiples actores (alumnos, padres, maestros, directores, políticos, etc.). Por tanto, parece evidente que la decisión de impulsar este tipo de políticas en cada contexto debería estar basada en evaluaciones rigurosas y no en opiniones o intuiciones acerca de la efectividad de las mismas.

 


[1] De Witte and Rogge (2014) Does ICT matter for effectiveness and efficiency in mathematics education? Computers & Education, disponible en http://www.tierweb.nl/assets/files/UM/Working%20papers/TIER%20WP%2014-05.pdf
[2] Para ver una descripción detallada de la técnica de emparejamiento o matching en inglés, puede verse Cameron y Trivedi (2005).
[3] La endogeneidad surge cuando la disponibilidad y el uso de TICs están asociados a otros factores no observables por el investigador que simultáneamente afectan al rendimiento académico (por ejemplo, motivación de los padres o maestros en el uso de las TICs). En ese caso las estimaciones del efecto causal de las TICs sobre los resultados académicos resultan sesgadas ya que el efecto se confundiría con los efectos de las variables no observadas.

LINKS

http://www.econstor.eu/bitstream/10419/21222/1/dp362.pdf
http://www.mecd.gob.es/dctm/inee/evaluacionpct/pctescuela20sjv2.pdf?documentId=0901e72b81a1ab04